WASHINGTON D.C. - La oleada de migrantes centroamericanos que llegan a México exige acciones urgentes de todos los países de la región para abordar la problemática que tiene en aprietos al país azteca, según advierte la Alta Comisionada adjunta de la Organización de las Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR), Gillian Triggs.
Los fuertes desplazamientos señalados por la representante de Naciones Unidas se producen en momentos que Estados Unidos mantiene bajo fuerte protección la frontera su y cuando maneja cifras históricamente bajas de solicitudes de asilo, mientras sigue aplicando el Articulo 42 debido a la pandemia como enfoque de seguridad nacional asociado con la pandemia.
"En México, Guatemala y El Salvador, he visto la tremenda tensión que sufre la región debido a los crecientes flujos de refugiados y migrantes. Los gobiernos y la sociedad civil están haciendo esfuerzos extraordinarios para abordar estos desafíos", dijo Triggs a través de un comunicado.
La funcionaria dijo que ha escuchado historias desgarradoras de quienes huyen del Triángulo Norte de Centroamérica acosados por violencia sexual, amenazas de muerte, extorsión en comunidades controladas por las pandillas y redes del crimen organizado; sumado a las dificultades económicas y los efectos del cambio climático.
Para la Alta Comisionada Triggs –sin duda- estas condiciones “han obligado a casi un millón de personas a abandonar El Salvador, Guatemala y Honduras; huyen de sus hogares”, explicó.
La agencia de Naciones Unidas dice que ha puesto a disposición su equipo para trabajar en coordinación con los gobiernos centroamericanos como hiciera con Guatemala, donde un equipo de ACNUR ayudó a lanzar un programa de prevención de violencia sexual.
“Crear las condiciones que hagan que las personas se sientan seguras y protegidas en sus hogares es un paso esencial para abordar las causas fundamentales que llevan a las personas a huir en esta región”, acotó.
México cuello de botella y opción para quedarse
México es considero como país de tránsito de los migrantes en ruta a Estados Unidos. Pero este 2021 el país enfrenta una fuerte presión ante la subida exponencial de solicitudes de asilo.
Solo este año la secretaría de estado a cargo del tema migratorio ha registrado unas 100.000 solicitantes de protección; al tiempo que aumenta el número de repatriados y desplazados desde la frontera sur de Estados Unidos que no logran el objetivo de cruzar el Río Bravo y penetrar en suelo estadounidense.
La agencia de Naciones Unidas llama a Estados Unidos a poner fin a las restricciones de asilo bajo el pretexto de salvaguardar la salud pública con el Título 42 y que se permita a los migrantes aplicar al beneficio.
El subsecretario de política Fronteriza y migratoria del Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU.(DHS), David Shahoulian, dijo a la prensa en agosto que los albergues siguen en su máxima capacidad y los encuentros con migrantes y grupos familiares que intentan adentrarse en territorio estadounidense son significativos.
En los registros de octubre de 2020 a junio de este año la Oficina de Adunas y Protección de Fronteras (CBP) cuenta un total de 751.844 migrantes expulsados bajo el Título 42. Y durante el mes de julio se reportaron al menos 210.000 encuentros con migrantes incluyendo unos 19.000 casos de menores de edad no acompañados y unos 80.000 grupos familiares.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones; o bien, síguenos en redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.