Tras multitudinarias manifestaciones de organizaciones sociales la semana pasada en el centro de Buenos Aires, el ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, convocó a todos los movimientos de manifestantes a una reunión para este miércoles 22 de junio.
En medio de una grave crisis que se traduce en inflación, crecimiento de la pobreza, desempleo y falta de alimentos, los dirigentes sociales reclaman más asistencia social.
Desde el Gobierno tratan de contener la situación, pero aclaran que no aceptarán extorsiones o no darán más planes sociales, ya que hay 182 programas que cubren a más de 22 millones de argentinos.
“Hemos logrado construir con organizaciones sociales opositoras más lejanas con el pensamiento del Gobierno, fue un vínculo porque indudablemente Argentina que tiene 57% de pibes pobres que tiene el 40% de pobreza, que tiene 11% de indigencia, es una Argentina con dificultades y hay reclamos que son genuinos. La decisión es ir buscando soluciones, pero no permitir extorsión, lo pone el Gobierno”, dijo el ministro d Acción Social, Juan Zabaleta.
Del otro lado, la activista Silvia Saravia, líder de la organización Barrios de Pie, expresó no sentirse tan confiada.
“Esperamos que se revierta esta situación, aunque la verdad no tenemos mucha expectativa respecto a la creación de puestos de trabajos y de combatir efectivamente la pobreza”, dijo Saravia.
Agregó que, “en nuestro país productor de alimentos estamos aun con dificultades para la asistencia de los comedores y merenderos … así que realmente hay una preocupación muy grande”.
Otro líder, Eduardo Belliboni, de la agrupación más combativa Polo Obrero, advirtió que si no hay respuestas se hará un nuevo campamento multitudinario en la Avenida 9 de Julio, frente al Ministerio de Desarrollo Social, en pleno centro de la Capital Federal a partir del jueves próximo.
“Un gobierno que esta lucrado con un ajuste desastroso contra la población, no atiende estos reclamos, pero no podemos llegar al límite de que no se le entreguen la comida a los comedores populares, a que no haya programas sociales abiertos para los que necesitan, por lo tanto, vamos a votar un fuerte plan de lucha con movilizaciones, con acampe, con permanencia, con cortes de ruta, que no podemos pagar el ajuste aquellos que no lo hemos provocado y el Gobierno tiene que escuchar estas demandas que se van a ir generalizando en este país si no hay respuesta”, dijo Belliboni.
Los movimientos piqueteros también presionan a las dos centrales sindicales más importantes del país, la Confederación General del Trabajo, CGT, y la Central de Trabajadores Argentinos, CTA, para que convoquen a un paro general para evitar el ajuste que viene de la mano del Fondo Monetario Internacional.
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